Máscara forma un equipo con un joven jugador Bakugan llamado Rikimaru ofreciéndole un Bakugan muy especial. Mientras tanto, Dan comienza a entrenarse para su revancha con Máscara. Drago duda de los motivos de Dan pero decide unirse con él en la esperanza de que pueda salvar Vestroia, el hogar de los Bakugans. Al borde de la derrota con Rikimaru, Drago decide ignorar las órdenes de Dan y utiliza una peligrosa técnica para salvarse y ganar la batalla. Insultado y enojado, Dan maldice el día en el que se encontró con Drago y lo lanza al río.